Hermandad de la Milagrosa

Muy buenas a mis hermanos, amigos costaleros y aspirantes en general.
Quisiera agradecer a la hermandad de La Milagrosa la oportunidad que me da de dirigirme a vosotros con unas breves palabras, en el estreno de la página web de la hermandad.
Deseo que vivamos muy intensamente todos los actos y eventos que nos presente esta humilde pero querida hermandad de La Milagrosa.
Que participemos juntos los Costaleros y CAPATACES actuales, así como todos aquellos aspirantes que desean un día pertenecer a este gran grupo humano.
Quiero que esta nueva red social sirva también para facilitar la llegada de todo tipo de información por parte de este equipo de CAPATACES que presido. Tanto la hermandad como nosotros vamos a utilizar esta herramienta de trabajo como vía de comunicación.
Todos los que tengáis una duda, pregunta o sugerencia, no dudéis en dejarnos aquí reflejadas vuestras inquietudes. Y en la mayor brevedad posible os atenderemos y daremos respuesta.
Por último, esta reflexión que ha llegado a mis manos, quisiera compartirla con vosotros.
En un mundo donde la velocidad y las prisas imperan, paremos un instante y hagamos propósito de enmienda y vamos a intentar cada uno en su interior, cambiar el ritmo de las cosas y aprendamos a esperar.
«Ven Señor de la Esperanza , y enséñame a esperar.
Porque las cosas que deseo no llegan rápidamente, enséñame a esperar.
Porque no puedo pretender que mis hermanos cambien de un día para el otro, enséñame a esperar.
Porque yo mismo voy cambiando muy lentamente, enséñame a esperar.
Porque la vida tiene sus estaciones y todo llega a su tiempo, enséñame a esperar.
Para que acepte que no estoy en el cielo, sino en la tierra, enséñame a esperar.
Para que no le exija a este día lo que no me puede dar, enséñame a esperar.
Para que reconozca que el mundo no puede estar a mi servicio, enséñame a esperar.
Ven Virgen del Rosario , y enséñame a aceptar que muchas cosas se posterguen, para que valore lo que la vida me propone ahora, aunque sea pequeño, aunque parezca poco.
Ven Virgen Milagrosa , enséñame a esperar.
Amén.»
Y no olvidemos potenciar los lazos de unión entre nosotros, pero no sólo a través de las redes sociales, sino que como yo digo… volvamos a lo antiguo, donde vernos ,abrazarnos y charlar entre nosotros sea algo normal. Ya que desgraciadamente todo esto se está volviendo un bien escaso.
Con estas palabras arrancamos esta página web y os doy a todos la bienvenida a formar parte de la familia de La Milagrosa.
Zarpemos a navegar con las cuentas de un Rosario en el Galeón de la Esperanza.
Estaremos en contacto.
Siempre caminando
Atentamente:
Ricardo Manuel López Ruíz «Almansa»